Edward Bach tenía una
visión espiritual de la vida y del ser humano.
Para él, el malestar y la insatisfacción que sentimos se
produce porque hay un conflicto entre nuestra alma (entendida como nuestra
parte más auténtica, la que nos guía en el camino a seguir para evolucionar) y
nuestra personalidad, que a veces, por diferentes razones, se aleja de quién
verdaderamente somos.
Las esencias florales ayudan a recuperar esta armonía
interior.
"Cuando nuestras personalidades se desvían del camino trazado por el alma, o bien por nuestros deseos mundanos
o por la persuasión de otros, surge el conflicto.
Ese conflicto es la raíz, causa de enfermedad y de infelicidad.
Edward Bach "Curese Vd. mismo"
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